Tuesday, October 30, 2007

 

Crean grupo sobre humedales de la Cuenca del Plata en el marco de la Convención Ramsar

El acuerdo se firmó en la cuarta Reunión Regional Panamericana de la Convención de Ramsar, realizada días atrás en Mérida, Venezuela. Representantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, acordaron avanzar en la construcción de una estrategia para la conservación y uso sustentable de los humedales fluviales.

Representantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay, acordaron conformar un grupo de contacto con el propósito de avanzar en la construcción de una estrategia para la conservación y uso sustentable de los humedales fluviales de la Cuenca del Plata. El compromiso fue firmado durante la cuarta Reunión Regional Panamericana de la Convención de Ramsar sobre los Humedales, realizada días atrás en Mérida, Venezuela, según informó Oscar Padín delegado argentino en el encuentro internacional.

El grupo de contacto funcionará con apoyo de un foro electrónico administrado en la Argentina e integrado por representantes gubernamentales de los países que conforman la Cuenca del Plata y por la Consejera Principal para las Américas de la Convención Ramsar, María Rivera, además del representante regional en el Comité Permanente de Ramsar, del Centro Regional Hemisférico (CREHO) con sede en Panamá y de las organizaciones internacionales Wetlands International y WWF. Asimismo se avanzará en la incorporación de otras organizaciones internacionales asociadas a la Convención Ramsar y ONGs nacionales que trabajan en el tema, de acuerdo al documento signado en Mérida.

La declaración suscrita por los países de la Cuenca del Plata constituye un importante avance en las acciones que vienen desarrollando los gobiernos y organizaciones no gubernamentales, en pos de la conservación de estos importantes sistemas de humedales, irremplazables para la provisión de agua dulce y el mantenimiento de la biodiversidad –indicó Padín, quien es titular del Grupo de Recursos Acuáticos de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable (SAyDS).

La iniciativa tiene entre sus antecedentes más importantes la reunión de Poconé, Brasil, en agosto de 2005, organizada por el Ministerio de Medio Ambiente (MMA) de ese país y el auspicio de la ONG brasileña ECOA, donde en un documento conocido precisamente como “Acta de Poconé”, se acordó con los representantes de los países de la Cuenca desarrollar un “Programa integrado para el desarrollo sostenible del Sistema de Humedales Paraguay–Paraná”, el más importante de la región.

Más recientemente, se realizó este año en Buenos Aires el “Taller Regional sobre el Sistema de Humedales Paraguay-Paraná: Construyendo un programa integrador del manejo sustentable de humedales y la reducción de la pobreza”, con el apoyo de Wetlands International (WI). El evento, organizado por la Fundación Proteger y WI América del Sur, convocó a más de treinta representantes de ONGs nacionales, organizaciones internacionales, altos funcionarios de gobierno y técnicos de Argentina, Brasil, Bolivia y Paraguay, países que comparten la Cuenca del Plata en la cual precisamente se inscribe el corredor de humedales de los ríos Paraguay y Paraná. También participaron puntos focales nacionales de la Convención Ramsar.

Cabe recordar que en la 9ª Conferencia de las Partes (COP9) de la Convención Ramsar, en Uganda, noviembre de 2005, la resolución IX.7 sobre iniciativas regionales destacó la iniciativa de los humedales de los ríos Paraná y Paraguay, junto a otras como la estrategia de humedales altoandinos. Se espera que, a partir de lo acordado en Mérida, Poconé y Buenos Aires, los humedales de la Cuenca del Plata tengan un lugar relevante en la COP10 de Ramsar, Corea 2008, como modelo de cooperación internacional y manejo de cuencas compartidas. Impulsar la creación de un programa regional de sustentabilidad y de proyectos de uso racional y reducción de la pobreza bajo los lineamientos de la Convención Ramsar son otros objetivos convergentes en la iniciativa.

“El acuerdo de Mérida es un paso importante, una excelente noticia considerando el esfuerzo que ONGs, funcionarios, académicos y comunidades de los países de la Cuenca venimos haciendo desde hace más de diez años. El objetivo es preservar la integridad de este corredor de humedales único que beneficia a 20 millones de personas y a actividades productivas que dependen del agua y los recursos que provee, entre otras funciones y servicios insustituibles como la mitigación de inundaciones y sequías”, dijo por su parte Jorge Cappato, punto focal no gubernamental para Argentina de la Convención Ramsar y presidente del Comité Sudamericano de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN).

El sistema de humedales, de más de 3.400 kilómetros de longitud, recoge las aguas del Pantanal y el río Paraguay y se entronca con el tramo medio e inferior del río Paraná en la Argentina desembocando finalmente en el Río de la Plata. El Gran Pantanal y la planicie aluvial de estos grandes ríos constituyen un corredor de áreas húmedas considerado el más extenso del planeta –y uno de los grandes reservorios mundiales de agua dulce y biodiversidad.

“Los cinco países se enfrentan ahora con el desafío de continuar y profundizar las acciones que puedan acordarse y crear lineamientos para las políticas de gestión en relación con la conservación de los humedales de la Cuenca”, indicó finalmente Padín. www.ecoportal.net

Proteger
www.proteger.org.ar

http://www.ecoportal.net/content/view/full/73463

 

"¡Alto! Paraná S.A.", responsable de devastación ambiental y contaminación en Misiones, Argentina

Entre el 10 y 13 de octubre, más de 800 jóvenes de organizaciones campesinas, indígenas y barriales de distintas provincias de Argentina y de Brasil se encontraron en el VII Campamento Latinoamericano de Jóvenes para compartir sus luchas y realizaron una movilización hacia la forestal Alto Paraná, una de las mayores responsables de la devastación ambiental y la contaminación de la zona.

Entre el 10 y 13 de octubre, en Piray, provincia de Misiones, más de 800 jóvenes de organizaciones campesinas, indígenas y barriales de distintas provincias de Argentina y de Brasil se encontraron en el VII Campamento Latinoamericano de Jóvenes para compartir sus luchas, conocimientos, alegrías y sueños. Como parte de las actividades se realizó una movilización hacia la forestal Alto Paraná, una de las mayores responsables de la devastación ambiental y la contaminación de la zona. Miriam, del Movimiento Campesino de Misiones, nos cuenta esta experiencia

“El Campamento Latinoamericano que se realizó en nuestra provincia, en nuestra zona, acá en Piray estuvo buenísimo como experiencia. Nos alegró poder compartir un poco las necesidades y las inquietudes de las distintas zonas. Sabemos que el escenario es diferente pero la problemática en realidad es latinoamericana. Estuvieron gente de Santiago del Estero, del MoCaSE Vía Campesina, gente de Buenos Aires, de Brasil, de Salta, Jujuy, de muchas partes de las provincias.

Las problemáticas son iguales. Estamos todos luchando por la tierra, por el agua, contra las grandes empresas, y por ahí es esto lo que nos hace articular y juntar las voces para reclamar. Nosotros acá en la zona de Piray la lucha que se quiere estar alzando y haciendo reclamos, más allá de nuestras provincias, es el tema de la tierra. Acá tenemos una empresa que tiene gran parte de Misiones plantada con pinos, y la lucha también es contra los agrotóxicos. Estamos viendo también el tema del agua, que es un tema que nos preocupa mucho acá en la zona.

Hace muchísimo que está instalada la Empresa Alto Paraná en la provincia. La acción que se hizo fue una marcha con todos los jóvenes que participaron en el campamento, y se logró ir hasta la empresa. Es gracioso, porque invitamos a todos los medios para contarles de qué se trataba, para ver si nos apoyaban y sacaban al aire estas cosas, pero no aparecieron muchos medios de la zona.

Esto nos hace pensar que somos unos pocos los que estamos intentando sacar a la luz esto y hay mucha gente que no se quiere comprometer. Fuimos alrededor de 800 jóvenes que participamos. Se llegó hasta la planta, se hizo una mística donde se representó la problemática y se le entregó un petitorio a la Empresa Alto Paraná.

En la lucha están los mismos campesinos. Hay grandes empresas que concentran toda la tierra sin pensar que hay gente que vive ahí, que está viviendo de la chacra. Si uno se junta pisás más fuerte, te escuchan más allá. Porque si empezás a hacer en forma más individual o en grupitos chicos, nadie te escucha.

Sería bueno mantenernos siempre comunicados, estar intercambiando estas experiencias, como se van llevando adelante, cómo nosotros podemos ir siguiendo esos pasos. No es nada fácil. Sabemos que la lucha es contra una empresa grande y que no va a ser fácil. Lo que tenemos que hacer todavía, más adelante, es concientizar a la gente de nuestra zona, de qué es lo que está pasando, qué es lo que está sucediendo. Es como que todavía no despertaron, y más adelante se nos vienen cosas peores. Tenemos la esperanza, de que de a poquito, despacio, trabajando y concientizando a la gente, llevar adelante nuestros reclamos.

Todas las organizaciones que estuvieron presentes nos trasmitieron mucha energía y muchas fuerzas. Vimos algunos videos de algunas marchas y algunas acciones que ellos hicieron y hoy esas acciones tienen ya frutos. Nosotros tenemos la esperanza que el día de mañana, todo el esfuerzo, el trabajo que se está haciendo va a tener sus frutos, se va a llegar a algo bueno.”www.ecoportal.net

Fuente:

Agite después de usar - http://agite.ourproject.org/index.php?q=blog/1

Publicado por Biodiversidadla - www.biodiversidadla.org

http://www.ecoportal.net/content/view/full/73578

 

Cambio climático ¿Cuál es la pregunta?

24-10-07, Por Herman E. Daly *


¿Por qué no aplicar un impuesto fuerte a la extracción de carbono?. El bien público más importante al que contribuiría un impuesto al carbono sería la estabilidad del clima, generada por la reducción del uso de combustibles de carbono y el incentivo para inventar fuentes energéticas que hagan menor uso intensivo del carbono.

Es oportuno recordar que construimos el mundo por las preguntas que formulamos. El diseño de políticas de acuerdo con los primeros principios nos permite actuar ahora sin quedar empantanados en demoras eternas provocadas por asuntos de complejas mediciones y predicciones empíricas.

La mayor atención prestada recientemente al calentamiento global es muy loable. Aparentemente, lo que más se mira son los complejos modelos climáticos y sus predicciones. No obstante, es útil retroceder un poquito y recordar una observación del físico John Wheeler: “Construimos el mundo por las preguntas que formulamos”. ¿Cuáles son las preguntas que formulan los modelos climáticos, qué tipo de mundo están construyendo, y qué otras preguntas deberíamos hacernos que hagan posible otros mundos?

Los modelos climáticos preguntan si las emisiones de dióxido de carbono (CO2) provocarán concentraciones atmosféricas de quinientas partes por millón, y si eso elevará las temperaturas en dos o tres grados Celsius para determinada fecha. ¿Cuáles serán las posibles consecuencias físicas en el clima y la geografía, y qué secuencia, y según qué distribuciones de probabilidades?

¿Cuáles serán los perjuicios acarreados por tales cambios, así como los costos de abatirlos, y cuáles son las relaciones del valor actual de los costos del perjuicio comparado con los gastos de reducirlo? ¿Qué tipo de mundo se crea con esas preguntas? Seguramente un mundo con una incertidumbre y complejidad tan enormes como para paralizar cualquier política. Los científicos no se pondrán de acuerdo con las respuestas de esas cuestiones empíricas.

¿Es posible hacer una pregunta diferente que cree un mundo diferente? ¿Por qué no preguntar: podemos continuar emitiendo sistemáticamente crecientes cantidades de CO2 y otros gases de efecto invernadero a la atmósfera sin provocar finalmente cambios climáticos inaceptables? Los científicos estarán mayoritariamente de acuerdo en que la respuesta es “no”. La ciencia básica, los primeros principios y las direcciones de causalidad son muy claros.

Concentrarse en ellos crea un mundo de relativa certeza, por lo menos en lo que hace a la dirección de las políticas. Sólo los índices, secuencias y valoraciones son inciertos y están sujetos a debate. En la medida que nos centremos en medir esas consecuencias empíricas intrínsecamente inciertas en lugar de concentrarnos en los primeros principios que las causan, inundaremos el consenso de “hacer algo ahora” con los reclamos de segundo orden de “saber primero las consecuencias exactas de lo que podríamos hacer algún día”. Para expresarlo de otro modo, si en caso de emergencia hay que tirarse de un avión, lo que uno necesita es un paracaídas resistente más que un altímetro preciso. Y en caso de que tuviéramos un altímetro, no sea cosa que por registrar el descenso ¡nos olvidemos de tirar el cordón del paracaídas!

La siguiente pregunta que haríamos es: ¿qué es lo que provoca que sistemáticamente emitamos cada vez más CO2 a la atmósfera? Es lo mismo que nos hace emitir más y más residuos de todo tipo a la biosfera, es decir, nuestro compromiso irracional con el crecimiento exponencial permanente en un planeta finito. Nuevamente formulamos la pregunta equivocada: ¿cómo podemos crecer más rápido y hacernos ricos? En lugar de eso deberíamos preguntar: el crecimiento de la economía, en la medida que se expande físicamente y desplaza la biosfera finita, ¿realmente aumenta los beneficios de la producción más rápidamente de lo que aumenta los costos ambientales y sociales? ¿Cómo sabemos que los costos no están aumentando ahora más aceleradamente que los beneficios, y que no hemos trasladado la escala óptima de la economía a la biosfera y entramos en una era de “crecimiento antieconómico”? Nuestros PIB miden solo la “actividad económica” y no distinguen las actividades costosas de las beneficiosas.

El “mundo vacío” del siglo XIX sentó las bases de la economía neoclásica, en la cual la quema de más combustibles fósiles nos hizo más ricos porque los costos ambientales eran insignificantes. Pero en el “mundo lleno” del siglo XXI nos hace más pobres porque los costos de oportunidad ambiental son muy grandes. Por consiguiente, las políticas deberían apuntar ahora a reducir la producción de combustible fósil en lugar de aumentarla.

¿Es difícil encontrar una política razonable para hacer esto? En realidad no. Un estricto impuesto compensatorio sobre el carbono, cobrado en el origen -a boca de mina o en el puerto de entrada- contribuiría mucho a reducir su uso y a dar un incentivo al desarrollo de tecnologías alternativas libres de carbono.

Sí, pero ¿cómo sabemos cuál es la tasa óptima de impuesto, y no sería regresivo? Una vez más, construimos el mundo por las preguntas que formulamos. Necesitamos recaudar fondos públicos de alguna manera, así que ¿por qué no aplicar un impuesto fuerte a la extracción de carbono y compensarlo con un impuesto débil a los ingresos? Es decir, gravar la producción de carbono (aquélla a la cual se le agrega valor) y dejar de gravar el valor agregado. Gravar a los “malos” (el agotamiento del recurso y la contaminación), no a los “buenos” (el ingreso). ¿Alguien piensa que gravamos el ingreso con un índice óptimo? Mejor es gravar primero lo que sea necesario y luego preocuparnos sobre el índice óptimo de gravamen, la compensación por regresividad, etc.

A la gente no le gusta ver que el valor agregado con su propio esfuerzo se esfuma con los impuestos, aun cuando acepta que es necesario hasta cierto punto. Pero a la mayoría no le importa que se graven las rentas de los recursos, el valor que nadie agregó. Y el bien público más importante al que contribuiría un impuesto al carbono sería la estabilidad del clima, generada por la consiguiente reducción del uso de combustibles de carbono y el incentivo para inventar fuentes energéticas que hagan menor uso intensivo del carbono. Además, gran parte de los ingresos recaudados por el impuesto al carbono podría devolverse al público aboliendo otros impuestos, especialmente los regresivos como el impuesto al salario.

Establecer políticas de acuerdo con los primeros principios nos permite actuar ahora sin quedar empantanados en demoras eternas provocadas por asuntos de complejas mediciones y predicciones empíricas. Por supuesto que las incertidumbres no desaparecen. Las experimentaremos como consecuencias inesperadas, tanto agradables como desagradables, que requerirán una corrección en la marcha de las políticas aplicadas sobre la base de los primeros principios. Pero por lo menos habremos comenzado a movernos en la dirección correcta. Continuar como hasta ahora, mientras se debaten las predicciones de modelos complejos en un mundo cada vez más incierto por la forma en que lo diseñamos, implica no tirar del cordón del paracaídas. Las consecuencias que tendría esta última omisión, lamentablemente, son muy ciertas. www.ecoportal.net


* Herman E. Daly es economista ecológico, profesor de la Escuela de Políticas Públicas de la Universidad de Maryland (Estados Unidos) y autor de Steady State Economics y For the Common Good.

La Diaria de Montevideo, Uruguay. www.ladiaria.com.uy

Red del Tercer Mundo - www.redtercermundo.org.uy



http://www.ecoportal.net/content/view/full/73617

 

Las autonomías y el control de los Recursos Naturales. El caso de Santa Elena

26-10-07, Por Elizabeth Bravo *


Uno de los efectos que se generará a partir de las propuestas de autonomía hechas por la derecha ecuatoriana, será establecer enclaves en zonas llamadas “marginales”, pero ricas en recursos, bajo nuevas formas de colonialismo interno. Grupos que detentan el poder económico, se apropian de los recursos existentes dentro de una región ubicada dentro de su “territorio autonómico”, excluyendo a los usuarios tradicionales de dichos recursos


Uno de los efectos que se generará a partir de las propuestas de autonomía hechas por la derecha ecuatoriana, será establecer enclaves en zonas llamadas “marginales”, pero ricas en recursos, bajo nuevas formas de colonialismo interno.

Grupos que detentan el poder económico, se apropian a través de las autonomías, de los recursos existentes dentro de una región ubicada dentro de su “territorio autonómico”, excluyendo a los usuarios tradicionales, de dichos recursos.

Adicionalmente, las rentas que genere la explotación de esos recursos se quedarían en la región autonómica, y no se redistribuirían en toda la Nación, pero tampoco se beneficiaría toda la circunscripción autonómica, sino que se quedará con los mismos grupos de poder.

Para ilustrar lo anterior, se va a usar el caso de la provincialización de la Península de Santa Elena. ¿Por qué se ha opuesto el Partido Social Cristiano a la creación de la Provincia de Santa Elena?

Compuesta por extensas tierras áridas e “improductivas” no cabría pensar que esta oposición se deba a intereses económicos específicos. A pesar de ello, cuando el Congreso Ecuatoriano consideró la provincialización de Santa Elena, el propio prefecto de Guayas, acompañado por cientos de personas llegaron a protestar frente al Congreso, y hasta se dice que circuló dinero para comprar conciencias.

Sea esto verdad o no, lo que entonces sucedió dejó en evidencia que las fuerzas social cristianas no querían que Santa Elena se convierta en la Provincia 23, pero ¿porqué?

Las riquezas de Santa Elena

Si nos acercamos un poco al interior de Santa Elena, veremos que es algo más que tierras áridas y casi inhabitadas, y que a pesar de sus diferencias ecosistémicas, hay más de una similitud con la región Amazónica.

Unas 800.000 Ha más o menos continuas forma parte de territorio Wankavilca. Ellos están organizados en comunas, y tuvieron el reconocimiento de su territorio en 1983.

Aunque el pueblo Wankavilca, ha perdido su idioma, está en un proceso de reconstrucción de su identidad. Uno de los factores que le caracteriza es la cultura en torno al sistema agrícola de las albarradas, que integra una forma de manejar el agua y recuperar la fertilidad del suelo. Las albarradas han sido usadas en esta región desde hace miles de años.

Por otro lado, registros históricos revelan que la Península de Santa Elena estuvo en otros tiempos ocupada por frondosos bosques. En 1748, cuando Jorge Juan y Antonio de Ulloa visitaron la Península como parte de la misión geodésica francesa, describieron los bosques de la zona así:

"su abundancia y calidad no se encuentran no sólo en ningún otro lugar del país, ni en otro país de América, más ni en otros dominios de la nación española, ni dependientes de otros monarcas".

En torno a esos bosques se desarrollaron astilleros donde se construían naves para la Armada del Mar del Sur, y en Guayaquil surgió una industria de aserraderos y ebanistería importante, así como otras actividades industriales ligadas a la explotación, transporte, y exportación de madera. Debido a la sobre-explotación de la madera, en 1767 el Gobernador de Guayaquil emitió una prohibición de explotar madera sin permiso del Gobierno, y en 1778, el Presidente de la Audiencia promulgó una ordenanza regulando la explotación de madera. Pero la tala no se detuvo y los bosques desaparecieron.

Desde esa época se revela que Guayaquil veía a Santa Elena como a su propia colonia, de la que podía extraer los recursos hasta llevarlos al extremo de la extinción.

Hoy, los intereses por la península podrían ser muchos, pero se mueven bajo la misma lógica.

Aquí se analizarán solo dos.

Santa Elena, el granero de Guayaquil

Con el proyecto Daule Peripa, los suelos de la provincia de Santa Elena pueden convertirse en suelos de extrema fertilidad y a través de este proyecto, se está dando un proceso de reconcentración de la tierra a través de la privatización del agua de riego.

Esto es algo que los comuneros de Santa Elena han vivido desde que se empezó a construir el trasvase Daule-Peripa, cuando, el Estado inició un proceso de afectaciones a las tierras comunales. En 1994 se dicta la Ley de Desarrollo Agrario y se empiezan a dividir las tierras comunales y se abre el mercado de tierras. En la Península esto significó la fragmentación tanto de las tierras comunales como de las organizaciones locales.

Las comunas empezaron a ser objeto de acoso por parte de los empresarios del agronegocio, que deseaban estas tierras para implantar cultivos de exportación como mango (y hoy caña para la producción de etanol). Algunos comuneros cedieron.

Los agricultores que quieren beneficiarse del agua de riego tienen que pagar cantidades exorbitantes de dinero para tener acceso al agua. Como ellos no pueden pagar se han visto obligados a vender la tierra. Una estrategia para la apropiación de la tierra fueron los créditos. Cuando los comuneros no podían pagar sus deudas, su terreno que había sido hipotecado, pasaba a manos del Banco que lo remataba a precios ínfimos y a favor de empresarios.

El trasvase se construyó a medida que avanzaba la compra de tierras, y no se hicieron canales secundarios que beneficien a los comuneros.

En otras zonas, a las cooperativas campesinas se les entregaba sistemas de riego y maquinaria obsoletos y si no daban un manejo eficiente, se les quitaba. Los empresarios del agronegocio de Guayaquil están detrás de las cooperativas para acceder a estos canales cuando las cooperativas fracasen, luego hacen inversiones para modernizar los canales, en muchos casos con crédito estatal.

Otras veces son los propios terratenientes los que otorgan créditos individuales a los comuneros, quienes reciben crédito hipotecando sus tierras. Si no pueden pagar, pierden la tierra.

En el contexto de las autonomías, las rentas generadas de estos cultivos industriales quedarían en la provincia de Guayas, pero sin que se reinvierta a la zona de Santa Elena.

El petróleo

Pero tal vez más interesante desde el punto de vista de las autonomías es que en la Península de Santa Elena hay reservas petroleras, que han sido ya concesionadas.

Muchas de las comunas se oponen a la extracción petrolera en la Península, sobre todo aquellas donde la gente ha podido ver los impactos de esta actividad en la Amazonía Norte.

La ambición de los grupos poderosos de Guayaquil es extraer esos recursos hidrocarburíferos, y que la renta petrolera se quede en la Provincia. Pero al igual que en la Amazonía, esta renta no será invertida en la Península, ni en las comunas, que lo único que recibirán a cambio serán los impactos que genera esta industria.

Y la renta petrolera… beneficiará mayoritariamente a las elites empresariales de Guayaquil.

Así como en el siglo XVIII la Corona Española saqueó y agotó los bosques de Santa Elena, hoy las elites de Guayaquil quieren hacer lo mismo, y lo quieren hacer a través de las autonomías. www.ecoportal.net


Acción Ecológica
www.accionecologica.org


http://www.ecoportal.net/content/view/full/73676/

 

Romina Picolotti afirma que el gobierno nacional discrepa con la política ambiental de Salta

La secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, Romina Picolotti, dijo que el gobierno de Kirchner “no coincide con la política ambiental del gobierno de Salta, porque ese tipo de políticas genera más pobreza para el pueblo salteño en particular y para el pueblo argentino en general", dijo la funcionaria a la agencia Noticias Argentinas.


En sintonía con las opiniones de Picolotti, el candidato del kirchnerismo en Salta anticipó que, de inmediato, su gobierno "adoptará medidas para garantizar una estricta protección de los recursos naturales”. Juan Manuel Urtubey anticipó que una de las primeras decisiones en materia de medio ambiente será “suspender todo desmonte hasta tanto se haga un ordenamiento territorial”. Añadió que debe protegerse la tenencia de la tierra a sus habitantes originarios.


En opinión del candidato del Frente para la Victoria "hay que suspender los desmontes hasta tanto no tengamos una solidificación del ordenamiento territorial y la fijación de presupuestos mínimos". También aludió a la necesidad de diseñar una racional y equitativa política en materia agua, atendiendo a los pequeños productores “que hoy no tienen acceso al agua ni forman parte de los consorcios de riego”.

En materia de tierras de propiedad del Estado, criticó los criterios aplicados para asignar las mismas durante el actual gobierno especialmente”. Uno de los casos más graves de esas políticas es el de Salta Forestal, al que calificó de “paradigma de lo que ha sido la privatización de los recursos naturales de la Provincia y un ejemplo de lo que no se debe hacer".

El candidato opina que deben ser revisados todos y cada uno de esos contratos de concesión de los recursos naturales pues la mayor parte de ellos “no se ajusta a los parámetros legales correctos y a partir de los cuales nosotros podemos pensar, no sólo en la preservación del medio ambiente, sino también en la posibilidad del crecimiento armónico de nuestros campesinos, comunidades y pueblos originarios".

Anticipó que en su futuro gobierno, desde el Estado Provincial no se convalidará "absolutamente ninguna adjudicación de tierras que no respete los derechos de las comunidades originarias". Prometió que habrá una política activa para garantizar la prescripción adquisitiva de aquellos que, por generaciones, tienen la tierra.

"Se favorecerá técnicamente a los que hoy no pueden ni pagar la mensura, ni demostrar los derechos posesorios que tienen por falta de capacitación propia o inclusive por la imposibilidad fáctica de no tener recursos como para hacerlo. Habrá una fuerte decisión para limitar "el abuso de posición dominante en el mercado. Creemos en el Estado como regulador, no desde la buena intención sino desde una política en donde una junta provincial compre la producción a un determinado precio referencial", explicó.

Aseguró que se crearán los ministerios de Recursos Naturales y de Asuntos Agrarios con perfil social. "Vamos a establecer políticas de fomento para el pequeño productor en términos de comercialización y financiamiento", señaló para destacar que "ese pequeño productor tendrá también la posibilidad de tener una atención en términos de relación con el Estado diferente al gran productor", referido a la carga impositiva.

http://noticias.iruya.com/content/view/2045/411/

Thursday, October 25, 2007

 

Por el Calentamiento Global, la capa de hielo del Artico se encuentra en su mínimo histórico

En los últimos 28 años se ha fundido casi un 40% de su superficie. Su superficie helada ha alcanzado el mínimo histórico desde que comenzaran las mediciones de satélite hace casi 30 años. Durante el pasado mes de julio se llegaron a registrar temperaturas de hasta 22 grados centígrados en una zona cuya temperatura media en esa época es de cinco grados.

El Ártico atraviesa por un momento crítico. Su superficie helada ha alcanzado el mínimo histórico desde que comenzaran las mediciones de satélite hace casi 30 años. Actualmente hay 4,28 millones de kilómetros cuadrados, un 23% menos que el anterior mínimo alcanzado en 2005 y un 39% inferior que la media anual entre 1979 y 2000.

Walt Meier, miembro del National Snow and Ice Data Center de Estados Unidos, organismo responsable de las mediciones, advierte de que se trata de "una marca dramática, pues no es que se haya batido el récord sino que se ha pulverizado". "La capa de hielo ha entrado en caída libre", alerta.

Según científicos de la Universidad de Queen, en Ontario (Canadá), durante el pasado mes de julio se llegaron a registrar temperaturas de hasta 22 grados centígrados en una zona, la isla Melville, cuya temperatura media en esa época es de cinco grados.

La reciente noticia de que el bloque de hielo de 66 kilómetros cuadrados -que en 2005 se desprendió de la plataforma helada de Ayles- se ha partido en dos y que una de las mitades se dirige directamente hacia las instalaciones de gas y petróleo de Alaska, es sólo un ejemplo de los estragos del cambio climático.

El enorme bloque de hielo de 66 kilómetros cuadrados que hace dos años se desprendió de la plataforma helada de Ayles, en el Ártico canadiense, permanecía encallado en las costas del norte de Canadá. Pero ahora se ha partido en dos y ambos bloques se dirigen, a distintas velocidades, hacia el sur. Y uno de ellos, que en apenas una semana ha conseguido recorrer casi 100 kilómetros, va directamente hacia las instalaciones de gas y petróleo de Alaska.

Luke Copland, uno de los científicos de la Universidad de Ottawa que sigue el devenir de este gigante de hielo, afirma que es "poco corriente" que un bloque de hielo vaya a la deriva en dirección sur a tanta velocidad. "En el pasado, otros grandes fragmentos helados se habían quedado, tras su desprendimiento, dentro del océano Ártico, o habían llegado como mucho hasta la zona norte de las islas Reina Isabel", explica Copland.

A su juicio, la causa que está empujando la "isla" tan lejos hacia el sur está en la escasez de hielo marino en el Ártico este verano.

Pero además de eso, los científicos identifican tres factores que han contribuido a estos bajos niveles de hielo marino. El hielo durante el invierno fue menos espeso de lo habitual; las temperaturas fueron particularmente altas durante el verano porque las corrientes llevaron al norte masas de aire caliente, y, por último, los cielos en esa zona del globo estuvieron muy despejados entre 43 y 55 días entre el 1 de junio y el 23 de julio, justo cuando el sol se sitúa encima del Ártico.

El hielo marítimo se congela y derrite estacionalmente, pero nunca se había reducido hasta una porción tan pequeña, según señaló el Centro Nacional de Datos sobre Hielo y Nieve de Estados Unidos, en Colorado. Comparado con 2005, este año hubo una reducción de más de 1 millón de kilómetros cuadrados. "Es la mayor caída desde un récord anterior que hayamos tenido jamás y es realmente bastante asombroso", dijo Walt Meier, un investigador del citado centro.

"Se trata de un cambio drástico en un año", dijo Meier sobre la reducción de la superficie de hielo de este año. "Desde luego hemos registrado una tendencia a la baja a lo largo de los últimos 30 años, pero esto está realmente acelerando la tendencia", agregó el científico.

A diferencia del derretimiento de los glaciares de Groenlandia y la Antártica, el derretimiento del hielo marítimo no contribuye a que suba el nivel global de los mares. Sin embargo, sin el reflejo de los rayos de sol en la superficie helada del mar congelado, la Tierra pierde lo que algunos científicos del clima llaman "su aire acondicionado". Y es que al haber menos hielo, el agua absorbe la radiación solar y eleva su temperatura. www.ecoportal.net

Consumer.es/EROSKI
www.consumer.es


http://www.ecoportal.net/content/view/full/73030

 

Corte de la Ruta 365 contra Minera La Alumbrera. El gobierno catamarqueño miente.

El corte de ruta es la respuesta de un pueblo de tres mil habitantes que ya estaba convencido de ese camino y sabe que para combatir la minería de las transnacionales deben desprenderse de la mafia extractiva asociada a gobernantes espurios.

La rotura del mineroducto es habitual. Los derrames del concentrado de cobre son imparables. Los mineros de La Alumbrera le pidieron socorro al INTI pero “sin publicidad”. Gigantescas fosas son el recurso para guardar transitoriamente la valiosa carga vertida por las roturas del ducto. El pueblo de Aconquija se cansó de tanta inexperiencia que incide en sus vidas y decidió impedir que las máquinas mineras construyan depósitos tóxicos y drenajes ácidos sobre sus viviendas.

La respuesta no se hizo esperar y, como siempre ocurre, fue el gobierno quien justificó los incidentes que generó las transnacional minera. El departamento Policía Minera de la Provincia de Catamarca informó al intendente de Aconquija (Andalgalá) Juan Carlos Espinosa, que las obras que realiza Minera Alumbrera en Río del Campo y otros parajes, “tienen por objeto proporcionar mayor seguridad en los procedimientos operativos del mineroducto”. El gobierno expuso que “los piletones de drenaje son excavaciones en terrenos naturales, con membranas y techo metálico”, pero al mismo tiempo que habla de drenajes asegura que no habrá infiltraciones.

¿Y por qué ocurre esto?

A esta altura de la explotación de Bajo La Alumbrera salen a decir que “el concentrado que transporta el ducto no es un desecho de plantas, sino que es un concentrado de minerales, con dos fases, sólida y líquida, por tanto no es un contaminante en sí” (textual). La incredulidad de los oyentes, periodistas y público, le hizo corregir a los funcionarios que “si se rompiera un caño que transporta grandes volúmenes puede generarse algún grado de contaminación que dependerá de la demora en la aplicación del plan de emergencia”. Las piletas, sostienen la empresa y el gobierno, “es parte del plan de mantenimiento del mineroducto” y al mismo tiempo confiesan que “son reservorios”.

La realidad es otra. El concentrado contiene cobre, oro, plata, diversos minerales poli metálicos, que no es cosa de perderlos. Las piletas son efectivamente “reservorios” que recogerán los derrames que ocasionan las continuas roturas de un mineroducto de más de trescientos kilómetros de longitud por el que viaja el concentrado de cobre a alta presión. Y esto es así porque la empresa ya no sabe qué hacer para resolver las pérdidas de minerales, las denuncias y juicios por contaminación que involucra a tres estados provinciales (Catamarca, Tucumán y Santiago del Estero), y la intervención de organismos de derechos humanos por el impacto social que esta actividad ocasiona.

Minera Alumbrera recurrió al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) con el objeto de estudiar el mineroducto y hallar una solución definitiva, pero la minera le advirtió a ese organismo que “existe un convenio de confidencialidad que les permite mantener en reserva las conclusiones y datos de dicho estudio.” Las autoridades del INTI no aceptaron esa exigencia y el resultado está a la vista: el ducto se seguirá rompiendo y el concentrado de cobre con la sopa química y los metales pesados irán a parar a piletones.

El pueblo de Aconquija cortó la ruta por donde deberán circular las máquinas que operan en esas excavaciones. El mineroducto se halla a menos de cuarenta pasos de las casas del “Barrio Veinticinco Viviendas” y un poco más abajo aparece la primera excavación. El contraste de las obras que acumularán drenajes ácidos, con los niños jugando sobre los montículos del ducto en el paradisíaco Cordón del Aconquija, a 2300 metros de altura, es una postal infrecuente que conmueve e indigna; pero la polución del polvo en suspensión provocado por la actividad minera en esas alturas es permanente.

Una espesa neblina oculta las montañas de la Cordillera de los Andes, algo impensado hace quince años. En la ruta provincial 365, que une a Catamarca con Tucumán en las altas cumbres, varios centenares de vecinos de Aconquija se turnan para reforzar el corte que se mantiene con alambres de acero, bloques de piedra, vehículos cruzados antes del puente del río Pizavil, carteles que anuncian “basta de contaminación y de saqueo”, “no a la soberbia” “fuera La Alumbrera. No a la minería contaminante”, rodeando a una olla popular fogoneada en el centro del camino, mientras películas y charlas se suceden debajo de una gran carpa construida -diríamos- con ánimo de quedar definitiva. Del otro lado del puente, señales colocadas por la policía local advierten que el paso se halla interrumpido.

Días previos estuvimos en la Facultad de Humanidades de Catamarca, donde expusimos sobre las invasiones mineras que contaminan, destruyen y saquean. En Andalgalá planificamos nuestra inmediata actividad a sesenta kilómetros hacia la bellísima cima de Aconquija. Allí se produjo el corte de ruta. Los compañeros catamarqueños nos invitaron con el sigilo de quienes no desean coparticipar con grupúsculos de la politiquería que copta movimientos sociales. El corte de ruta es la respuesta de un pueblo de tres mil habitantes que ya estaba convencido de ese camino. Los catamarqueños saben que para combatir la minería de las transnacionales deben desprenderse de la mafia extractiva asociada a gobernantes espurios, y para ello exige, mediante movilizaciones y denuncias, el inmediato cierre de Bajo La Alumbrera y la expulsión de la empresa de Agua Rica. Para algunos una utopía, para muchos de nosotros se trata de intentarlo y, en una de esas, deja de ser parte del imaginario quimérico. Luchar contra La Alumbrera y Agua Rica es una realidad indiscutible. www.ecoportal.net

Aconquija, Catamarca, 2 de octubre de 2007

* Javier Rodríguez Pardo
Movimiento Antinuclear del Chubut (Mach)
Red Nacional de Acción Ecologista (Renace)
Unión de Asambleas Ciudadanas (UAC)


http://www.ecoportal.net/content/view/full/73141

 

Latinoamérica contamina sus fuentes de agua de manera acelerada y peligrosa

Se realizó en Guadalajara la cuarta audiencia del Tribunal Latinoamericano del Agua. Las naciones del hemisferio han convertido sus ríos en estercoleros, advierte el organismo. El representante del tribunal del agua, Javier Bogantes Díaz, recomendó a las naciones de América Latina que obliguen a sus sectores industriales a respetar las normas para no contaminar los cuerpos hídricos



América Latina está perdiendo aceleradamente su sustentabilidad hídrica; sólo basta salir de las ciudades para comprobar que los ríos se están convirtiendo en estercoleros por el mal manejo del recurso, advirtió el director del Tribunal Latinoamericano del Agua (TLA), Javier Bogantes Díaz.

México, Perú y El Salvador, añadió, están en una situación de estrés hídrico, y si sus gobiernos no quieren pasar en pocos años de la alerta amarilla a la roja, tendrán que obligar a sus industrias a que cumplan las normas y reglamentos.

También hizo un llamado a la unidad de todos los sectores de la sociedad, incluidos los gobiernos, para considerar prioritario el asunto del agua. “Salvar las diversas fuentes del líquido no es sólo una decisión política, sino de toda la gente”, indicó.

En la cuarta audiencia pública, en el paraninfo de la Universidad de Guadalajara, representantes de Perú y México comentaron que la situación se torna más crítica porque las autoridades “dan más atención a quien tiene más poder económico o a quienes son afines políticamente”.

Bogantes Díaz puntualizó que los veredictos y resoluciones del TLA no son vinculantes, pero la difusión internacional de las sentencias y la condena moral de la comunidad internacional encausarán la búsqueda de alternativas para solucionar conflictos.

Insistió que el TLA no puede obligar a un Estado a tomar decisiones sobre los casos presentados. “Este es un tribunal ético y la formulación de sus pronunciamientos, hechos por expertos en derecho, salud y medio ambiente, tienen como propósito alertar a las autoridades que el asunto del agua es urgente, que no podemos seguir disfrutando de la naturaleza si seguimos poniendo en peligro la sustentabilidad hídrica de futuras generaciones”.

Casos analizados

En la jornada de ayer, integrantes del Frente de Defensa del Agua, al que pertenece la Asociación de Colonos del Fraccionamiento Manantiales, de Cuatla, Morelos, expusieron que el año pasado se instaló en esa zona una gasolinera, que se encuentra a 350 metros del pozo El Calvario, que aporta 80 por ciento del líquido a las familias de la región

Señalaron que las familias están en “alto riesgo”, debido a que la manifestación de impacto ambiental de la obra reporta 52 anomalías. Rolando Hernández, integrante del organismo, dijo incluso que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) reconoció que hay riesgo alto de contaminación del acuífero, uno de los más importantes de la zona Chichinautzin-Popocatépetl.

“En México hay pocos estudios sobre el riesgo de contaminación por el confinamiento de combustibles, pero los que hay son alarmantes”, añadió.

En Estados Unidos, abundó, la autoridad ambiental ha localizado 200 mil sitios en condiciones similares que dejaron inutilizados las fuentes de agua. “No queremos lo mismo para nuestra región; sabemos que la normatividad de Pemex es muy laxa”.

En tanto, Silvia Espinoza, vecina de dicho fraccionamiento, agregó que en seis años de lucha, Rafael Anguiano Orozco, propietario de la gasolinera, y sus abogados han acusado de “mentirosos y corruptos” a los colonos. Incluso, Margarita Rosado Palomo, presidenta de la asociación, y Noé Neri Gutiérrez (vecino) fueron acusados de despojo, por lo que tuvieron que tramitar un amparo para no ser apresados. “Defender el agua no es un delito, pero al parecer para las autoridades del estado y del municipio sí, porque las demandas de la empresa han prosperado, pero no las de los colonos, a pesar de que hemos presentado documentos oficiales que sustentan diversas irregularidades”.

El representante legal de la gasolinera, Miguel López, negó los señalamientos de los colonos, y presentó diversos documentos de Pemex y de la Conagua, en los que se asienta que no existe contaminación de mantos freáticos.

Dijo que Rosado Palomo y el abogado del Frente de Defensa del Agua pidieron 2 millones de pesos y que se les escriturara un predio para siete líderes. Por eso “nosotros desconocemos a dicho frente y sólo dialogaremos con la asociación de colonos”.

Los siete integrantes del TLA recibieron una copia del caso para que la analicen y ofrezcan su opinión. www.ecoportal.net

La Jornada
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Friday, October 05, 2007

 

¿Limpiar el Riachuelo?

Tal vez lo más sugestivo del último intento fallido de limpieza del Riachuelo no haya sido la falta de voluntad política. Esta vez, lo que más llama la atención es la absoluta incompetencia profesional de las cabezas encargadas de hacer una tarea mucho más difícil que organizar un mundial de fútbol, según la poco feliz expresión de la Secretaria de Ambiente.


Tal vez lo más sugestivo del último intento fallido de limpieza del Riachuelo no haya sido la falta de voluntad política. Estábamos acostumbrados a eso desde septiembre de 1871, cuando la ley de erradicación de los saladeros fue la última acción seria de saneamiento.

Esta vez, lo que más llama la atención es la absoluta incompetencia profesional de las cabezas encargadas de hacer una tarea mucho más difícil que organizar un mundial de fútbol, según la poco feliz expresión de la Secretaria de Ambiente. La diferencia de fondo es que el fútbol se juega a la vista de todos. Aquí, por el contrario, los que protegen a los contaminadores se ocultan entre los pliegues del poder y el público nunca ve a los verdaderos jugadores.

Pero el llamado Plan lo hizo un grupo cerrado, sin aprovechar la experiencia y conocimientos de los profesionales de un organismo como la Secretaría de Ambiente, que hace 35 años viene trabajando el tema. ¿Sabían tanto que no los necesitaban o simplemente no se dieron cuenta de lo complejo que es el tema? Por lo visto, el principio constitucional de idoneidad para quienes ocupen cargos públicos no parece regir para los niveles políticos. Recordemos, sin embargo, que entregar la Secretaría de Ambiente a un equipo incompetente es, también, una decisión de prioridades políticas: nadie ha puesto nunca un inútil para dirigir el Banco Central o cualquier otro organismo encargado de manejar el dinero.

En este contexto, discutir un Plan que nadie tiene interés o capacidad para llevar a la práctica es un ejercicio intelectual, pero el que esto escribe es docente y está habituado a hacer en el aula reflexiones que ayuden a pensar un tema, aún sabiendo que lo que allí se diga nunca llegará al mundo real.

• Necesitamos estudios epidemiológicos continuados y exhaustivos. El Riachuelo no es un tema de recursos naturales. Es una cuestión de salud pública. Allí hay gente que enferma por la contaminación, y, sin duda, hay gente que muere por culpa de ella. El mejor indicador de la negligencia oficial es la reiterada negativa de las autoridades de hacerlos. Del mismo modo que una decisión equivocada en la guerra provoca muertes inútiles, el no detectar a los contaminados a tiempo hará que muchos de ellos enfermen y mueran. Recordemos que el cáncer sólo es curable si hay una detección precoz, y que cientos de miles de personas están sujetos a una importante exposición a cancerígenos. Aún más: nuestros profesionales tienen mucha experiencia en los efectos sobre la salud de tóxicos que actúen en forma individual, pero esta cuenca tiene todos los tóxicos imaginables.

Semejante combinación de agentes peligrosos registra pocos antecedentes en la bibliografía internacional. Hay que computar, entonces, un tiempo de aprendizaje de cómo actuar ente los efectos de sinergia provocados por la acción conjunta de tantos tóxicos, que tal vez nos cueste muchas más muertes de las que ya ocurren y que nadie quiere contabilizar.

• Hay que reglamentar las leyes ambientales. Cuando la Corte Suprema de Justicia les ordenó a las autoridades hacer un plan para el saneamiento del Riachuelo, lo fundamentó con una repetición minuciosa de los artículos de la Ley General del Ambiente. Se trató de un fallo redactado de un modo inusual: generalmente se cita un pedacito de una Ley, pero no la Ley entera, artículo por artículo. Sucede que el Poder Ejecutivo lleva varios años de retraso en la reglamentación de esa Ley. No hay que ser muy sutil para darse cuenta de que la Corte le estaba recordando su obligación de reglamentarla. Sin embargo, las únicas personas que no se dieron cuenta de eso fueron aquellas a las cuales la indicación iba dirigida. Hay varias leyes ambientales de presupuestos mínimos que aún no han sido reglamentadas y que serían herramientas útiles en este proceso.

Por ejemplo, tal vez no hubiera sido necesario sancionar una muy publicitada Ley que creara un Comité de Cuenca en el Riachuelo. Ya hay una Ley de Aguas que ordena lo mismo para todas las cuencas hídricas del país. Bastaba con reglamentarla, aunque tal vez alguien haya pedido que no lo hicieran.

Algo semejante está pasando con la Ley que ordena el retiro del PCB antes del año 2010 y que debería ser una herramienta importante para sacar de la zona al menos ese contaminante. Al no reglamentarse, no se cumplen los plazos de la Ley y se crea la situación para que las empresas pidan una prórroga, siguiendo con los tóxicos hasta más allá del 2010.

• Cumplir las leyes. Pareciera que, a diferencia del resto de las normas, las leyes ambientales son de cumplimiento optativo. Cuando la Secretaria de Ambiente le dijo a la Corte que más del 80 por ciento de las industrias de la cuenca contaminan, es decir, que están fuera de los parámetros legales, debió haber indicado las sanciones que aplicaría. Se supone que para eso pidió una Ley que le diera el monopolio del poder de policía. Pero hasta ahora ese monopolio del poder sólo ha servido para que ningún otro lo pudiera ejercer. La confesión: “están violando la Ley y yo se los permito”, es otra de las facetas poco explicables de esta situación.

• Medir realmente la contaminación. Parece redundante, y por eso hay que recordar que todas las fábricas que contaminan tienen preparada una puesta en escena: una pequeña planta de tratamiento de efluentes que depura una porción ínfima de los tóxicos que arroja la empresa y que se opera sólo cuando llega la inspección. De modo que, además de la visita a las empresas es necesario ir con un bote a tomar muestras del lado de afuera de los caños de salida. La diferencia entre lo que parece que arrojan visto desde adentro y lo que realmente tiran puede ser abismal.

• Depurar los líquidos cloacales. Las medidas propuestas son una especie de entretenimiento hasta tanto se realice la obra principal: un canal subterráneo, que pase por debajo de la ribera sur del Riachuelo (es decir, el partido de Avellaneda) y que saque de la vista del público los líquidos contaminados. Su destino será el Río de la Plata, a través de un largo caño llamado emisario. Los líquidos tendrán un ligero tratamiento (pretratamiento), que no es mucho más de un colador y una licuadora para que no se vean los sólidos.

No es una idea nueva. Esta obra ya fue propuesta por Hipólito Yrigoyen en 1929 y reiterada por María Julia Alsogaray en la década de 1990. Su aspecto más objetable es que no depura los líquidos cloacales sino que cambia la contaminación de lugar. Previsiblemente, no parece haber estudios de la capacidad de carga del cuerpo receptor, ya muy comprometido. Ni sobre el riesgo de que esta obra acerque aún más los contaminantes a las tomas de agua de servicio público.

Además, no se presentaron estudios sobre el impacto ambiental de la obra misma. Tengamos en cuenta que por la pendiente requerirá instalaciones de bombeo, que atravesará la zona del Dock Sud y que pasará por entre innumerables vertidos y rellenos clandestinos de residuos peligrosos. El riesgo de que la obra ponga en biodisponibilidad (es decir, haga circular por el ambiente) una cantidad importante de esos residuos es alto, y si se trabaja con el descuido que todo indica, es casi la certeza.

• Por supuesto, no dragar el fondo. La Secretaria de Ambiente informó que en algunos sectores se dragaría el fondo para retirar el barro contaminado. Esto significa, nuevamente, poner en biodisponibilidad una cierta proporción de esos tóxicos, que ahora están quietos en el fondo y que navegarían hacia el Río de la Plata. Por otra parte, la Secretaria no dijo que construirían una planta de tratamiento para su destrucción. ¿Significa esto que los tirarán al Río de la Plata? Me parece que tal vez eso no ayude mucho en nuestra polémica con Uruguay por el uso responsable de los recursos hídricos compartidos.

• ¡Olvídense de las bacterias transgénicas! La afirmación más pintoresca (y que merecería un aplazo en cualquier curso elemental de medio ambiente) fue la de arrojar al curso de agua bacterias transgénicas, comedoras de petróleo. Por supuesto que esas bacterias se utilizan, pero sólo en la limpieza de sitios absolutamente confinados, como las piletas de desechos de la explotación de hidrocarburos. Allí se reproducen explosivamente, comiéndose el petróleo y cuando se les termina el alimento, simplemente se mueren de hambre. Pero liberar bacterias genéticamente modificadas en un ecosistema abierto es correr el riesgo de que vuelvan a mutar y se transformen en un organismo peligroso que carezca de enemigos naturales. Una operación que ni el Dr. Frankestein se atrevería a realizar.

Creo que para ejercicio intelectual ya estamos. Nada de esto siquiera se va a intentar realizar. El único aporte creativo fue reemplazar una expectativa de mil días por otra de mil años. www.ecoportal.net


http://www.ecoportal.net/content/view/full/72963

 

Denunciarán siete casos en los que se ponen en riesgo recursos hídricos de América Latina

El Tribunal Latinoamericano del Agua celebrará una audiencia pública en México, en la que expertos de la región emitirán recomendaciones sobre siete casos que amenazan los recursos de la región. Se presentarán pruebas documentales y orales que certifiquen la afectación y se dictarán resoluciones sobre los mismos. Se presentarán cuatro casos de México, uno de Chile, otro de Perú y uno más de Honduras.


El Tribunal Latinoamericano del Agua celebrará una audiencia pública en México, en la que expertos de la región emitirán recomendaciones sobre siete casos que amenazan los recursos de la región, como son la afectación –por parte de constructoras– del acuífero Chalco-Amecameca, que abastece 55 por ciento de agua del Distrito Federal, y la grave contaminación del río Santiago, en Jalisco, que ya empezó a provocar enfermedades entre pobladores de El Salto y Juanacatlán.

Del 8 al 11 de octubre también se analizarán los casos de las afectaciones a la población de Cerro San Pedro por la explotación a cielo abierto que lleva a cabo la empresa Minera San Xavier, y la contaminación del pozo El Calvario que afecta el abasto de agua de Cuautla, Morelos, por las operaciones de la gasolinera Millenium 3000.

Este tribunal, que es una “instancia alternativa de justicia ambiental”, llevará a cabo la audiencia pública en Guadalajara, Jalisco, en octubre próximo. Antes ha sesionado en San José, Costa Rica, en los años 2000 y 2004, y en la ciudad de México, el año pasado, precisó el director de este organismo, Javier Bogantes.

En conferencia de prensa señaló que se seleccionaron siete casos, los cuales son de gran relevancia para la conservación de los cuerpos de agua en México y América Latina. Apuntó que el incremento a las tarifas del agua no es una medida oportuna para resolver el problema de escasez del líquido.

Puntualizó que como en todos los tribunales se presentarán pruebas documentales y orales que certifiquen la afectación y se dictarán resoluciones sobre los mismos. Se presentarán cuatro casos de México, uno de Chile, otro de Perú y uno más de Honduras.

En cuanto a México, resaltó los daños que se provocan a la salud de los pobladores de El Salto y Juanacatlán, por efecto de la excesiva contaminación del río Santiago, en Jalisco, ya que se ha comprobado que las emanaciones tóxicas provenientes de ese caudal han generado graves impactos sanitarios en las comunidades, por los desechos de nitratos, residuos agroquímicos y de fertilizantes que se vierten al mismo, y que provocan enfermedades respiratorias y digestivas en los niños.

Dijo que también se analizará la afectación al acuífero Chalco-Amecameca por la construcción de proyectos inmobiliarios en el Valle de México, lo que es grave porque provee de agua a 55 por ciento de los habitantes de la Zona Metropolitana del Distrito Federal y se estima que la construcción de dichos proyectos en la zona de recarga del acuífero pondrá en entredicho el abasto.

También están bajo amenaza los recursos hídricos y comunidades del Valle del Pupío, en Chile, como resultado de las operaciones de la minera Los Pelambres, porque la construcción de un tanque para residuos mineros se pone en riesgo las fuentes hídricas de la comunidad. En la misma situación está el municipio de Cerro de San Pedro, en San Luis Potosí, ya que la Minera San Xavier desarrolla un proyecto sobre una zona de recarga acuífera que abastece a 40 por ciento de la población del estado.

Otros casos que se analizarán son la sobreexplotación y contaminación de 19 de las 22 fuentes de agua del Valle de Siria, Honduras, por efecto de la actividad minera, que ha dejado a 40 mil personas sin acceso al líquido y la amenaza a las comunidades autóctonas de Carhuancho, Perú, por la construcción de un canal recolector de 73 kilómetros. www.ecoportal.net

Publicado en La Jornada
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Argentina: en Salta sigue el saqueo. Todo un pueblo está en peligro por el desmonte de una selva

Se trata de los habitantes de la zona salteña de Las yungas, los aborígenes debieron abandonar el bosque porque la tala los dejó sin agua ni comida. La Secretaría de Medio Ambiente de Salta autorizó el desmonte de 228.835 hectáreas, el equivalente a 12 veces la Ciudad de Buenos Aires.



Las topadoras avanzan con la potencia de un tanque de guerra y arrasan, cada dos minutos, con una hectárea de bosque nativo argentino. En la porción salteña de la Selva de Yungas, el avance de la agricultura late como una bomba de tiempo: las comunidades que vivían en el monte superpoblaron los asentamientos de Orán, la ciudad más cercana, y ahora mendigan por sus calles de polvo.

Sin árboles que contengan el agua, el pueblo más cercano: Orán, se inunda y su gente está aprendiendo a convivir con la presencia crónica de enfermedades: hantavirus, leishmaniasis y dengue. La selva de Yungas está en emergencia forestal. Y la gente de Orán vive bajo esa amenaza.

Un informe de la Secretaría de Ambiente de la Nación enciende la alarma: entre 2002 y 2006, la pérdida de bosques salteños se duplicó en relación al período 1998-2002. Según Greenpeace, en 2007 la secretaría de Medio Ambiente de Salta convocó a audiencias públicas para autorizar el desmonte de 228.835 hectáreas: el equivalente a 12 veces la Ciudad de Buenos Aires.

"La protección de bosques no es una mera demanda ecologista de atrasados que no ven el progreso", dice Walter Pengue, director del postgrado de Economía Ecológica de la UBA. Se refiere a que la decisión de hipotecar el ambiente en nombre del desarrollo ya impacta en la gente. Orán muestra las huellas horizontales de las inundaciones. "Sin árboles se reorienta el agua, los suelos se impermeabilizan y los pueblos se inundan", explica a Clarín Jorge Morello, doctor en ciencias naturales. El pronóstico no es alentador: "La falta de cobertura vegetal reduce la capacidad de la selva de retener agua. Por eso, como pasó en Tartagal, podrían haber aludes", completa Daniel Somma, doctor en ciencias ambientales.

Según el último censo, en Orán viven 124.000 personas. Esa ciudad es hoy tierra de contrastes: camionetas 4x4 que se rozan con pobladores de las etnias kolla, avá guaraní y wichí que, indirectamente, fueron expulsados de sus tierras: "A los campesinos y a los aborígenes se les cerró hasta el acceso al agua. Ahora viven en asentamientos y en condiciones de subalimentación: antes cazaban o pescaban, hoy comen en los basurales", cuenta Morello.

"Es mentira que el desmonte provoca inundaciones, cambios climáticos o que aumenta los casos de leishmaniasis. Y si los indígenas migran a las ciudades es porque allí encuentran mejores condiciones de vida. El desmonte es una etapa de un proceso productivo y el impacto positivo a largo plazo es más importante que el impacto negativo inmediato", dijo a Clarín Gustavo López Ascencio, secretario de Medio Ambiente de Salta.

Salta autorizó el desmonte de 1.670 hectáreas para que una empresa pueda sembrar soja. Las tierras están en el territorio que fue incluido por la UNESCO en la reserva mundial de biosfera. ¿Qué significa? Según la web del municipio de Orán, "satisfacer las necesidades de la generación presente sin comprometer las de las generaciones futuras". Los hechos dicen otra cosa. www.ecoportal.net

Minutouno
www.minutouno.com/


http://www.ecoportal.net/content/view/full/72926

 

http://puntonoticias.com/noticias_de_mar_del_plata.asp?codigo=5142

Lo aseguró la secretaria de Política Ambiental de la provincia de Buenos Aires, Silvia Suárez Arocena, en el marco de la jornada de apertura del IV Congreso y Exposición Mundial de Energía Eólica, que no contó con la asistencia del gobernador Felipe Solá.

El encuentro se realiza en los salones del Sheraton Mar del Plata Hotel y por primera vez se realiza en el continente americano.

Es organizado por la Asociación Argentina de Energía Eólica (AAEE), con el apoyo de la Asociación Mundial de Energía Eólica, el patrocinio de la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación, y el auspicio de la Secretaría de Política Ambiental de la Provincia de Buenos Aires.

El acto de apertura estuvo encabezado por Anil Kane, presidente de la Asociación Mundial de Energía Eolica, Erico Spinadel, presidente de la Asociación Argentina de Energía Eólica, el intendente Daniel Katz y la secretaria de Política Ambiental, Silvia Suárez Arocena.

Además están presentes el secretario General de Energía de España, Ignacio Nieto, el secretario de Estado de Medio Ambiente de Alemania, Michael Müller y el ministro de la India, Vilas Muttewar.

El encuentro reúne a personalidades nacionales e internacionales del ámbito político y científico quienes durante los tres días de duración del evento presentarán nuevos avances tecnológicos y trabajos especiales de investigación sobre esta temática.

Ya se han presentado más de 300 trabajos de todo el mundo sobre energía eólica y la ocasión será propicia para reflexionar sobre el viento y la posibilidad de esta fuente no contaminante de energía.

La energía eólica es hoy a nivel mundial una industria que moviliza capitales y genera empleos, ocupando a mano de obra calificada y no calificada, propiciando el crecimiento de las economías nacionales y regionales.

Suárez Arocena manifestó que "resulta necesario la implementación de créditos blandos para el desarrollo de la actividad, ya que la mayoría de las inversiones surgen del campo privado".

La funcionaria consignó que "es un tema que se debe desarrollar más, y este encuentro en la provincia de Buenos Aires resulta un paso importante".

Además, reconoció estar al tanto de un proyecto para que la empresa OSSE se alimente de energía eólica al cual definió como "un proyecto ambicioso" y adelantó que "se deberán gestionar créditos internacionales que permitan desarrollar estos proyectos".

Suárez Arocena afirmó que "la provincia de Buenos Aires importa toda la energía primaria desde otras provincias e inclusive del exterior, lo cual deja una huella ecológica importante".

"Por eso tenemos que aprovechar aquellas energías que nos son propias y no generan un impacto ambiental adverso", añadió.

 

Definen el Dique Los Monos como una obra regional

El subsecretario de Recursos Naturales, Rubén Manfredi, sostuvo que la obra del Dique Los Monos “tiene que ver con un desarrollo sustentable en lo social, en lo ambiental y en lo económico”.
El funcionario señaló que las obras impulsarán “el desarrollo de la región”, mediante “el ordenamiento de la cuenca”; y en ese sentido agregó que “esto bien lo marca el gobernador Mario Das Neves en cuanto a tener una visión amplia del desarrollo, donde salgamos de los desarrollos localistas para pasar a un desarrollo integrado del conjunto de los patagónicos”.
Luego de asegurar que las obras “van a impactar fuertemente sobre el desarrollo de los chubutenses”, Manfredi destacó que las mismas “tienen como objetivo central asegurar el abastecimiento de agua para consumo humano”.
En ese marco el funcionario reivindicó “el mejor aprovechamiento” que se efectuará del agua, indicando que “hay que tener en cuenta que estos recursos van a ser cada vez más escasos y tenemos la responsabilidad de administrarlos”, para remarcar que “el hombre decididamente tiene que tomar la responsabilidad de manejar sus recursos”.
“Obviamente –aclaró- no estamos en las etapas de los ‘60 donde la atracción del desarrollo no incorporaba la variable ambiental, hoy el desafío que tiene el hombre frente a algunos impactos que se han generado que pueden demostrarse o se están demostrando, tiene que tener una actitud responsable en el orden del manejo y en ese sentido tienen que haber obras de manejo”, destacó Manfredi.
“Si algo hay que resaltar –prosiguió- es que esta obra apunta a eso, a que podamos disponer de un recurso de calidad y cantidad y sostenibilidad en el tiempo. Esto es una de las funciones centrales que tiene la obra y el ordenamiento de la cuenca en sí. Es el aprovechamiento al máximo de un recurso que tal cual está funcionando naturalmente, obviamente al no tener posibilidades de regularlo se pierde oportunidad de uso, y también tengamos en cuenta que si no lo regulamos en esta cuestión de asegurar el agua para abastecimiento humano, posiblemente tengamos problemas en situaciones críticas”, advirtió el Subsecretario de Recursos Naturales del Chubut.

Regulación del Colhué Huapi

Manfredi citó, como ejemplo de lo que significa un mejor aprovechamiento del agua, a la regulación que se hará del lago Colhué Huapi, y en ese sentido indicó que “cuando tenemos por ejemplo la variación que tuvo esta cuenca en épocas de sequía, el lago Colhué Huapi llegó a reducir significativamente su superficie con impactos ambientales no sólo locales sino que apuntaron a ciudades como Comodoro Rivadavia y demás”, recordó; por lo que afirmó que con las obras “diría que cinco veces más es la superficie que puede asegurar a la que llegó el lago Colhué Huapi”, al recordar que en una época de sequía ese espejo de agua llegó a tener una superficie de 98 kilómetros cuadrados.
En ese marco, Manfredi dijo que “el proyecto (Dique Los Monos) permite asegurar por regulación una superficie mínima del lago del orden de los 500 kilómetros cuadrados. Esto sin la obra de regulación no lo podríamos hacer”, afirmó.
A modo de síntesis el Subsecretario expresó que “esta obra combina la necesidad de protección del ambiente y regulación de los recursos con potencial en desarrollo del área”, destacar que “se pone en valor todo el valle y todas las economías que significan desarrollar un valle de bajo riego que hoy tiene 4 mil hectáreas y que pasará a 15 mil hectáreas”.
Finalmente Manfredi dijo que “en este ordenamiento de la cuenca del Senguer, cuenca que por otra parte compartimos con la provincia de Santa Cruz, se tiene como visión general el apuntar a estos proyectos de integración y desarrollo regional”.


http://www.diariodemadryn.com/vernoti.php?ID=80287

 

Cientos de organizaciones sociales marcharon contra el saqueo de los recursos naturales y la exclusión

MANIFESTACIÓN EN PLAZA DE MAYO. Organizaciones ambientalistas, entidades culturales y agrupaciones defensoras de los derechos de comunidades originarias y campesinos, entre otras, realizaron el lunes una masiva marcha hasta Plaza de Mayo, en Buenos Aires, para reclamar contra la contaminación y en defensa de la naturaleza y los recursos naturales. Además, se repudió el modelo neoliberal imperante y se reivindicaron los derechos de los marginados pueblos autóctonos. Se calcula que más de 5 mil personas de todo el país y del extranjero participaron de la movilización que involucró escraches a la empresa de ferrocarriles TBA-Metrovías, a la firma cerealera y productora de agroquímicos Monsanto, a la minera Barrick Gold y a las petroleras Repsol y Shell. Luego, se realizó un acto y una manifestación artística en Plaza de Mayo. (Foto de Norberto Costa).

http://www.primerafuente.com.ar/nota.asp?id_seccion=3&seccion=&id_nota=37369

Tuesday, October 02, 2007

 

Profundo debate sobre los efectos del cambio climático

La emisión de gases, las consecuencias irreversibles hasta dentro de medio siglo y las medidas que se toman para mitigarlas formaron parte de un seminario en el que se presentaron los datos del panel intergubernamental

En el corto plazo, la Argentina se verá obligada a tomar medidas de adaptación para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono. Las circunstancias que la obligarán son: por un lado, las presiones de los países como China, la India o Brasil, que en el plano global son los que más emisiones provocan, pero por capita tienen un nivel inferior al nuestro. Y por otro las serias limitaciones en el acceso a los hidrocarburos que el país tendrá en un plazo menor al de una década.
Ambas causas y sus múltiples efectos forman parte de uno de los nudos principales que hoy discuten los especialistas en cambio climático que ayer se juntaron en La Plata para debatir sobre el tema, en el marco de la presentación de los informes del Panel Intergubernamental de Cambio Climático, por primera vez traducidos al castellano.
Uno de los máximo referentes, el doctor Vicente Barros, perteneciente al Centro de Investigación del Mar y de la Atmósfera (CIMA), y al Conicet, habló con Hoy de las perspectivas Argentinas para adaptarse a un contexto que se avecina complejo. “La primera adecuación es previa al cambio climático, y está vinculada con la política energética, atendiendo la brecha negativa que ya existe entre producción y consumo de hidrocarburos, una de las principales fuentes de emisión de gases”, explica.
Esa realidad crítica, “nos llevará a emitir menos gases en la medida en que nos veremos en la obligación de consumir menos y buscar alternativas”, dice. Pero también habrá otras presiones. Será la de los países con mayor emisión de gases de efecto invernadero a nivel global, pero cuyo índice por cada habitante es menor al de la Argentina. “No nos podremos hacer los distraídos cuando esos países se vean obligados a tomar medidas”.
El panorama es poco alentador si se tiene en cuenta algunas proyecciones sobre modificaciones concretas que ya experimenta el clima. Las temperaturas seguirán creciendo en promedio hasta 1º o 1,5º, también lo harán las precipitaciones en algunas zonas del país, pero, fundamentalmente, “se sostendrá la caída del caudal de los ríos de la cordillera y la Cuenca del Plata, la cual llegara al 10 por ciento. La consecuencia es una afectación directa sobre la producción de energía hidroeléctrica.


http://www.diariohoy.net/notas/verNoticia.phtml/html/268538648/0000/Profundo-debate-sobre-los-efectos-del-cambio-clim%E1tico/

 

Piden cambiar los autos por bicicletas para combatir la contaminación

Se trata de una propuesta que nació y se desarrolló en Europa. Y llegó hasta La Plata. Busca reducir los niveles de contaminación que producen los automóviles. Aseguran que por enfermedades relacionadas con la polución fallecen más personas que en los accidentes de tránsito

Un paisaje diferente. Sólo bicicletas y peatones. Una postal que se repite en varias ciudades europeas pero que en la Argentina aún es difícil de imaginar. ¿La idea? Reducir los niveles de contaminación ambiental que amenazan la salud de la población.
La movida ecológica avanza en Italia, Francia, Alemania y España, países donde fueron pioneros en abandonar los autos y subirse a las bicicletas para evitar tanta contaminación. En nuestro país, por ahora, sólo se presentó un proyecto en la ciudad de Buenos Aires denominado bicing.
Se trata de un sistema de transporte basado en el uso público de bicicletas. Un servicio que consiste en que los usuarios se presenten en una estación, retiren en alquiler una bicicleta, se puedan dirigir a su destino y al llegar dejen el vehículo en una estación cercana.
En La Plata no se presentaron proyectos, pero el aumento de autos y motos en circulación llevó a entidades ambientalistas locales a pedir cambiar estos vehículos por bicicletas, un medio de transporte que no genera contaminación. Hoy, según estadísticas realizadas por Control Urbano, en nuestra ciudad se calcula que existe 1 automóvil cada 3 habitantes. Y el parque de motos se triplicó en los últimos meses.
Juan Carlos Peri, ambientalista de la ONG Por una ciudad limpia de contaminación, sostuvo a Hoy: “La contaminación mata más que los accidentes de tránsito”. Y agregó: “Para muchas personas es difícil de creer, pero debemos calcular cuántas personas mueren por enfermedades relacionadas con la contaminación”.
El cálculo sobre los efectos mortales de la contaminación causada por el tráfico se llevó a cabo a partir de los datos de la Unión Europea (UE) que indican que cada año fallecen de enfermedades relacionadas con la polución 225.000 personas en toda Europa, y de la estadística del ministerio de Medio Ambiente, casi cinco veces más de las que fallecieron en nuestro país en 2005 en accidentes de circulación (3.329).
Jorge Malpelli, integrante de Cuidemos el mundo, indicó: “Si las personas tuvieran la opción de usar la bicicleta con una infraestructura mínima que protegiera a los ciclistas del peligro de los vehículos, estamos seguros de que se incrementaría su uso”. Y añadió: “No únicamente como una actividad recreativa, sino como un medio de transporte alternativo, eficiente, económico, rápido y no contaminante”.
Cómo se contamina
La energía para mover un automóvil se obtiene de la quema de combustible de la gasolina en el motor. La contaminación que proviene de los automóviles se debe a los productos secundarios del proceso de combustión (que son emitidos por el tubo de escape) y de la evaporación del combustible.
Evaporación
l Diurnas: la evaporación de combustible aumenta cuando la temperatura sube. Esos vapores se escapan a la atmósfera.
l Pérdidas por funcionamiento: cuando el motor y el caño de escape se calientan pueden evaporizar la nafta.
l Motor caliente: el motor queda caliente un tiempo después de haberse apagado y, aún con el auto estacionado, la nafta se evapora.
l Carga de combustible: los vapores están siempre presentes en el tanque de combustible. Al momento de llenar el tanque con el combustible líquido, los vapores están forzados a salir y se escapan a la atmósfera.
Caño de Escape
l Hidrocarburos: las emisiones de hidrocarburos resultan cuando no se queman las moléculas del combustible en el motor o sólo se queman parcialmente. Los hidrocarburos reaccionan en presencia de los óxidos de nitrógeno y la luz solar para formar ozono a nivel del suelo, que es uno de los componentes principales del smog. El ozono irrita los ojos, perjudica los pulmones y agrava los problemas respiratorios. También ciertos hidrocarburos del tubo de escape son tóxicos, y tienen el potencial de causar cáncer.
l Oxidos de nitrógeno: bajo las condiciones de alta temperatura y presión que imperan en el motor, los átomos de nitrógeno y oxígeno del aire reaccionan para formar varios óxidos de nitrógeno. Como los hidrocarburos, son precursores de la formación de ozono.
l Monóxido de carbono: es un producto de la combustión incompleta y ocurre cuando el carbono en el combustible se oxida parcialmente en lugar de oxidarse por completo y formar dióxido de carbono (CO2). El monóxido de carbono reduce el flujo de oxígeno en el torrente sanguíneo y es particularmente peligroso para las personas con padecimientos cardíacos.
l Dióxido de carbono: el dióxido de carbono no atenta directamente contra la salud del ser humano, pero es un gas de efecto de invernadero que atrapa el calor de la tierra y contribuye potencialmente al calentamiento global.
Los tipos de contaminantes que producen los autos son varios, y afectan directamente la capa de ozono y el aire que respiran las personas. Para los especialistas, conducir un automóvil es quizás la actividad diaria más contaminante que el ciudadano común realiza. Y es por ello que existen distintas alternativas para colaborar en la reducción de la polución.

http://www.diariohoy.net/notas/verNoticia.phtml/html/268538355/0000/Piden-cambiar-los-autos-por-bicicletas-para-combatir-la-contaminaci%F3n/

 

Llamamiento de la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente ante el Cambio Ambiental Global

La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente está hondamente preocupada por el proceso nacional y mundial de deterioro progresivo y creciente de los sistemas naturales y sus recursos. Por los efectos adversos que los cambios observados tienen sobre las personas y la sociedad, siente el insoslayable imperativo de formular este llamamiento


La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente está hondamente preocupada por el proceso nacional y mundial de deterioro progresivo y creciente de los sistemas naturales y sus recursos. Por los efectos adversos que los cambios observados tienen sobre las personas y la sociedad, siente el insoslayable imperativo de formular este llamamiento a la opinión pública nacional, a las autoridades nacionales, provinciales y municipales y a los sectores del trabajo, la producción, la cultura y a los medios de difusión sobre estos impactos y su exacerbación.

La Academia quiere trasmitir el testimonio de su alarma ante los efectos y la trascendencia del Cambio Ambiental Global y sus implicaciones regionales, expresar su llamado de alerta y demandar una reacción urgente que rectifique el rumbo actual y modifique las modalidades de producción y consumo que son la causa principal del deterioro ambiental y del mal uso de los recursos que constituyen la base para el desarrollo económico y social sostenible.

La rectificación que se reclama requiere la participación de todos los sectores de la población, la utilización de todas las fuentes del conocimiento ambiental y el esfuerzo institucional para acordar una estrategia nacional ampliamente consensuada que reconozca la realidad, oriente los hábitos y defina las conductas individuales y colectivas, establezca las normas regulatorias y correctivas y asegure su efectiva aplicación.

Diagnóstico de la situación

La humanidad enfrenta un Cambio Ambiental Global originado por acciones antropogénicas que modifican las características físico-químicas y biológicas y alteran los procesos naturales en la atmósfera, en los océanos, en los sistemas de agua dulce y en los ecosistemas terrestres y su productividad. Esto causa entre otras consecuencias el deterioro de la capa de ozono, un cambio profundo en el sistema climático terrestre, la pérdida de diversidad biológica y la desertificación.

La exacerbación de los procesos de la temperie y el clima pone en evidencia cambios ambientales que se agravarán en las próximas décadas. Este Cambio Ambiental Global y, de manera particular, el calentamiento terrestre, amenazan la integridad, la productividad y las capacidades de adaptación de los sistemas naturales y sociales.

Las formas de aplicación de las modalidades de producción y consumo desarrolladas a partir de la primera revolución industrial han sido las causas básicas del deterioro global. Los bienes y servicios producidos por el hombre se comercializaron con precios altos y se expandieron en constante aumento, mientras los recursos naturales han sido usados como si fueran ilimitados, inagotables y gratuitos, rebajando su valor como bienes y sin una estimación apropiada de su significación patrimonial.

No se reconoció el valor intrínseco ni el valor económico de los sistemas biológicos y geológicos, y de los procesos naturales de los que dependen tanto las actividades de producción y consumo como el tipo de vida que existe en el planeta. Esta modalidad condujo a un continuo y creciente deterioro de los sistemas de apoyo vital, alentando demandas que han llegado a superar la producción sostenible de los ecosistemas y han consumido con ritmo creciente las reservas utilizables de los recursos no renovables.

Pareció olvidarse que la civilización dependió y depende por completo de sus recursos naturales y de sus ciclos y períodos de recuperación.

En consecuencia es necesario modificar las modalidades dominantes de producción y consumo introduciendo aportes de la ciencia y la tecnología que reconozcan la existencia de límites en los recursos naturales y en su capacidad productiva, consideren los aspectos humanos y sociales de las comunidades involucradas y los integren en la economía.

Por lo tanto el capital natural ha pasado a ser el factor limitante para un desarrollo económico sostenible. Consecuentemente, deberán adoptarse estrategias de mitigación y acciones de adaptación, que sean la base del diseño de políticas orientadas a aumentar la protección de los ecosistemas naturales y humanos, sus recursos y servicios ambientales y su productividad, e impulsen su uso racional.

Debido a su extrema complejidad resulta difícil anticipar con precisión la forma e intensidad con la que este problema afectará la continuidad de la vida y de la diversidad biológica en todos sus niveles, y particularmente a la especie humana, pero no cabe duda que sus impactos sobre la naturaleza y la sociedad influirán en los campos biológico, científico, económico, social, jurídico, político y espiritual.

Resulta imperioso, particularmente en nuestro país, mejorar los sistemas de observación y monitorear el comportamiento de las variables que definen la calidad ambiental. Ello permitirá aprovechar efectos beneficiosos en algunas regiones y mostrará en su integridad los impactos desfavorables que probablemente tendrán varias de las siguientes características:

• Aumentará la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos.
• Las sequías e inundaciones se tornarán más frecuentes y éstas últimas aumentarán las cargas de sedimentos y deteriorarán la calidad del agua.
• Los rendimientos de las cosechas experimentarán variaciones, en muchos casos negativas, por la acumulación de efectos del cambio climático y la degradación de los suelos.
• El derretimiento de los hielos polares, de los glaciares, y del permafrost de las latitudes altas, reducirá las escorrentías. Además modificará el albedo y al aumentar la absorción de calor, acelerará el proceso de calentamiento global.
• El aumento del nivel del mar afectará los asentamientos humanos costeros, su infraestructura y sus actividades productivas y aumentará la intrusión de agua salada en estuarios, ríos y aguas subterráneas.
• Disminuirá la disponibilidad de agua dulce en muchas regiones y particularmente donde se produzca la pérdida o retroceso de los grandes reservorios alimentados por glaciares.
• Los cambios en las temperaturas que llevan a su elevación en zonas templadas favorecerán el despliegue de vectores de enfermedades y parásitos en ciertas regiones donde actualmente no existen, afectando a las poblaciones humanas que carecen de la inmunidad adecuada y aumentando la incidencia de plagas agrícolas y enfermedades en el ganado.
• Se acelerará la tasa de pérdida de la diversidad biológica.

La Argentina es altamente sensible al Cambio Ambiental Global y al Cambio Climático en particular, porque su economía se funda fuertemente en la producción primaria y en el procesamiento de recursos naturales.

Los ecosistemas costeros y boscosos del territorio nacional, sus praderas, sus ecosistemas agrícolas y de agua dulce, sin excepciones, están mostrando inequívocas señales de deterioro.

Por tala y conversión, los bosques nativos se han reducido a una tercera parte del patrimonio original y se encuentran seriamente degradados. Las mayores reservas pesqueras marinas de la Argentina están sometidas a sobrepesca o se explotan en su límite de supervivencia. Los humedales se degradan y declinan en cuanto a la cantidad y la calidad del agua. Numerosas especies de agua dulce se encuentran amenazadas o en peligro de extinción. Avanza la desertificación y los suelos muestran graves procesos erosivos y pierden fertilidad. La contaminación y los residuos industriales y urbanos crecen rápida y peligrosamente.

Este escenario nacional es resultado de un proceso que no ha cuidado la necesaria conciliación entre el crecimiento económico por una parte y el progreso social, la protección del ambiente y la protección de los recursos naturales y su prudente administración por la otra.

En la Argentina frecuentemente se ha privilegiado el crecimiento económico mayor e inmediato sin la debida consideración de su impacto ambiental, razonando erróneamente que los problemas ambientales podrán resolverse cuando se alcancen mayores niveles de ingreso y de desarrollo tecnológico.

Sin embargo, los daños ambientales pueden ser irreparables y la restitución no siempre es posible. La remediación no es una alternativa que permita restablecer la calidad del recurso dañado y cuando los problemas se agudizan suele prevalecer la resignación pasiva.

Las dudas paralizantes y la carencia de decisiones suponen la ilusión de que el problema ambiental se resolverá solo, ignoran que esa ilusión es equívoca y peligrosa, y desconocen que es posible reducir drásticamente el impacto negativo de la acción humana sobre los sistemas naturales. Una acción ecológicamente racional sentará las bases para fundar un nuevo modelo de desarrollo.

Cooperación con la comunidad internacional.

Sin perjuicio de lo anterior la República Argentina ha mantenido una clara posición en defensa de la calidad del ambiente desde la década de 1950. Ello ocurrió en la negociación del Tratado Antártico, en la Comisión Ballenera Internacional, en la FAO, en la UNESCO y en otros organismos internacionales. Esa acción se profundizó en la década siguiente en el Consejo Económico y Social, en las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la adopción de diversas resoluciones sobre materias ambientales, sociales y económicas y en las conferencias y reuniones internacionales que desde la década de 1970 han jalonado el camino hacia una cooperación internacional que asegure condiciones de vida digna a todos los habitantes del planeta.

Nuestra representación lideró la negociación del Protocolo de Kioto en cuya gestión continúa participando activamente y también se destacó en la Conferencia de Johannesburgo sobre Desarrollo Sostenible.

Consecuentemente la República Argentina el país tiene títulos muy bien fundados para continuar orientando la cooperación multilateral en las materias vinculadas con el Cambio Ambiental Global en las conferencias y en los organismos internacionales.

Exhortación

En nuestro país resulta indispensable promover la responsabilidad social, económica y ambiental de todos los sectores para procurar la sostenibilidad del proceso de desarrollo. Para ello, el sistema científico y tecnológico, los empresarios, los trabajadores y las autoridades, deben concentrar conocimientos, recursos y esfuerzos para proteger y restaurar nuestros ecosistemas degradados, tanto los naturales como los urbanizados.

Deben modificarse los hábitos de producción y consumo para aprovechar en forma sostenible los recursos naturales y los desarrollados por el hombre. También es un deber promover el ordenamiento territorial y sistemas de gestión ambiental aptos para el sector productivo.

La República Argentina necesita reorientar el actual proceso de desarrollo dotándolo de amplitud, con participación de todas las áreas de la economía, de todas las zonas geográficas y de todos los grupos sociales. Es necesario integrar las políticas ambientales en la formulación de las políticas económicas y sociales centrales. El cuidado del ambiente y de los recursos naturales no funciona eficientemente cuando se lo aplica como un agregado tardío a decisiones básicas adoptadas sin haber tenido en cuenta desde el comienzo las consideraciones ecológicas.

Además el Estado debe evitar que los sectores de menores recursos soporten las peores condiciones de calidad de vida y sean los más agredidos por la contaminación y las demás externalidades negativas de un desarrollo no sostenible.

En este momento económico y social la Argentina está en condición propicia para sustituir modalidades de producción y consumo que no son sostenibles. El desafío de construir y consolidar un porvenir venturoso y fecundo mediante un desarrollo integrado y sostenible es altamente motivador, debe ser encarado con decisión y puede ser realizado con éxito. Los resultados que se alcancen beneficiarán a todos los habitantes y permitirán cuidar el patrimonio ambiental de la Nación, generando un país más vigoroso y una mejor calidad de vida para la generación presente y las venideras.

Propuesta de medidas y acciones inmediatas

El Cambio Ambiental Global descripto evidencia la urgente necesidad de la adopción de medidas y la ejecución de acciones orientadas a:

a) Integrar la información necesaria sobre las variables geofísicas, biológicas, sociales y económicas que permitan un manejo seguro y confiable de las actividades gubernamentales y privadas involucradas en las metas conducentes al progreso de la sociedad argentina.

b) Desarrollar, promulgar y poner en vigencia efectiva las leyes y reglamentaciones que aseguren el cumplimiento del Artículo 41 de la Constitución Nacional, a la luz de los nuevos escenarios naturales y humanos que resultan del Cambio Ambiental Global.

c) Posibilitar y propiciar que la obligación legal de preservar y mejorar el ambiente, bien común de todos los habitantes, sea asumida por la población en sus conductas individuales y particularmente, por el gobierno nacional y los gobiernos provinciales y municipales.

d) Constituir y mantener vigentes y efectivas instituciones apropiadas para la información y la educación ambientales y velar por el cumplimiento de las normas.

e) Realizar los estudios e investigaciones para un eficiente ordenamiento territorial, ambiental y productivo, con información completa de los recursos naturales (climáticos, geológicos y biológicos) y sus proyecciones posibles en tiempo y espacio, con el fin de asegurar el bienestar de todos los habitantes del territorio nacional.

f) Iniciar el análisis de las estrategias de adaptación necesarias para hacer frente a las consecuencias adversas del Cambio Climático Global, tomar provecho de los efectos beneficiosos que pudiera tener, y promover la mitigación de la emisión de gases de efecto invernadero y el secuestro y almacenaje de esos gases.

g) Promover y facilitar la contribución y participación de los profesionales y científicos y de sus centros e instituciones de base, para analizar y evaluar los problemas ambientales en las reuniones, conferencias, simposios y talleres regionales e internacionales.

h) Establecer un órgano consultivo nacional competente en esta materia para asesorar a los poderes públicos, integrado por representantes de reconocida valía profesional, científica, empresarial, sindical y de otros sectores relevantes.

i) Mantener el nivel de actuación de la República Argentina en los ámbitos bilateral, regional y multilateral y continúe y profundice las acciones y los esfuerzos que contribuyan a consolidar la solidaridad y la cooperación entre todas las naciones del mundo. www.ecoportal.net


http://www.ecoportal.net/content/view/full/72567

Monday, October 01, 2007

 

Llamamiento de la Academia Argentina de Ciencias del Ambiente ante el Cambio Ambiental Global

La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente está hondamente preocupada por el proceso nacional y mundial de deterioro progresivo y creciente de los sistemas naturales y sus recursos. Por los efectos adversos que los cambios observados tienen sobre las personas y la sociedad, siente el insoslayable imperativo de formular este llamamiento


La Academia Argentina de Ciencias del Ambiente está hondamente preocupada por el proceso nacional y mundial de deterioro progresivo y creciente de los sistemas naturales y sus recursos. Por los efectos adversos que los cambios observados tienen sobre las personas y la sociedad, siente el insoslayable imperativo de formular este llamamiento a la opinión pública nacional, a las autoridades nacionales, provinciales y municipales y a los sectores del trabajo, la producción, la cultura y a los medios de difusión sobre estos impactos y su exacerbación.

La Academia quiere trasmitir el testimonio de su alarma ante los efectos y la trascendencia del Cambio Ambiental Global y sus implicaciones regionales, expresar su llamado de alerta y demandar una reacción urgente que rectifique el rumbo actual y modifique las modalidades de producción y consumo que son la causa principal del deterioro ambiental y del mal uso de los recursos que constituyen la base para el desarrollo económico y social sostenible.

La rectificación que se reclama requiere la participación de todos los sectores de la población, la utilización de todas las fuentes del conocimiento ambiental y el esfuerzo institucional para acordar una estrategia nacional ampliamente consensuada que reconozca la realidad, oriente los hábitos y defina las conductas individuales y colectivas, establezca las normas regulatorias y correctivas y asegure su efectiva aplicación.

Diagnóstico de la situación

La humanidad enfrenta un Cambio Ambiental Global originado por acciones antropogénicas que modifican las características físico-químicas y biológicas y alteran los procesos naturales en la atmósfera, en los océanos, en los sistemas de agua dulce y en los ecosistemas terrestres y su productividad. Esto causa entre otras consecuencias el deterioro de la capa de ozono, un cambio profundo en el sistema climático terrestre, la pérdida de diversidad biológica y la desertificación.

La exacerbación de los procesos de la temperie y el clima pone en evidencia cambios ambientales que se agravarán en las próximas décadas. Este Cambio Ambiental Global y, de manera particular, el calentamiento terrestre, amenazan la integridad, la productividad y las capacidades de adaptación de los sistemas naturales y sociales.

Las formas de aplicación de las modalidades de producción y consumo desarrolladas a partir de la primera revolución industrial han sido las causas básicas del deterioro global. Los bienes y servicios producidos por el hombre se comercializaron con precios altos y se expandieron en constante aumento, mientras los recursos naturales han sido usados como si fueran ilimitados, inagotables y gratuitos, rebajando su valor como bienes y sin una estimación apropiada de su significación patrimonial.

No se reconoció el valor intrínseco ni el valor económico de los sistemas biológicos y geológicos, y de los procesos naturales de los que dependen tanto las actividades de producción y consumo como el tipo de vida que existe en el planeta. Esta modalidad condujo a un continuo y creciente deterioro de los sistemas de apoyo vital, alentando demandas que han llegado a superar la producción sostenible de los ecosistemas y han consumido con ritmo creciente las reservas utilizables de los recursos no renovables.

Pareció olvidarse que la civilización dependió y depende por completo de sus recursos naturales y de sus ciclos y períodos de recuperación.

En consecuencia es necesario modificar las modalidades dominantes de producción y consumo introduciendo aportes de la ciencia y la tecnología que reconozcan la existencia de límites en los recursos naturales y en su capacidad productiva, consideren los aspectos humanos y sociales de las comunidades involucradas y los integren en la economía.

Por lo tanto el capital natural ha pasado a ser el factor limitante para un desarrollo económico sostenible. Consecuentemente, deberán adoptarse estrategias de mitigación y acciones de adaptación, que sean la base del diseño de políticas orientadas a aumentar la protección de los ecosistemas naturales y humanos, sus recursos y servicios ambientales y su productividad, e impulsen su uso racional.

Debido a su extrema complejidad resulta difícil anticipar con precisión la forma e intensidad con la que este problema afectará la continuidad de la vida y de la diversidad biológica en todos sus niveles, y particularmente a la especie humana, pero no cabe duda que sus impactos sobre la naturaleza y la sociedad influirán en los campos biológico, científico, económico, social, jurídico, político y espiritual.

Resulta imperioso, particularmente en nuestro país, mejorar los sistemas de observación y monitorear el comportamiento de las variables que definen la calidad ambiental. Ello permitirá aprovechar efectos beneficiosos en algunas regiones y mostrará en su integridad los impactos desfavorables que probablemente tendrán varias de las siguientes características:

• Aumentará la frecuencia e intensidad de los fenómenos meteorológicos extremos.
• Las sequías e inundaciones se tornarán más frecuentes y éstas últimas aumentarán las cargas de sedimentos y deteriorarán la calidad del agua.
• Los rendimientos de las cosechas experimentarán variaciones, en muchos casos negativas, por la acumulación de efectos del cambio climático y la degradación de los suelos.
• El derretimiento de los hielos polares, de los glaciares, y del permafrost de las latitudes altas, reducirá las escorrentías. Además modificará el albedo y al aumentar la absorción de calor, acelerará el proceso de calentamiento global.
• El aumento del nivel del mar afectará los asentamientos humanos costeros, su infraestructura y sus actividades productivas y aumentará la intrusión de agua salada en estuarios, ríos y aguas subterráneas.
• Disminuirá la disponibilidad de agua dulce en muchas regiones y particularmente donde se produzca la pérdida o retroceso de los grandes reservorios alimentados por glaciares.
• Los cambios en las temperaturas que llevan a su elevación en zonas templadas favorecerán el despliegue de vectores de enfermedades y parásitos en ciertas regiones donde actualmente no existen, afectando a las poblaciones humanas que carecen de la inmunidad adecuada y aumentando la incidencia de plagas agrícolas y enfermedades en el ganado.
• Se acelerará la tasa de pérdida de la diversidad biológica.

La Argentina es altamente sensible al Cambio Ambiental Global y al Cambio Climático en particular, porque su economía se funda fuertemente en la producción primaria y en el procesamiento de recursos naturales.

Los ecosistemas costeros y boscosos del territorio nacional, sus praderas, sus ecosistemas agrícolas y de agua dulce, sin excepciones, están mostrando inequívocas señales de deterioro.

Por tala y conversión, los bosques nativos se han reducido a una tercera parte del patrimonio original y se encuentran seriamente degradados. Las mayores reservas pesqueras marinas de la Argentina están sometidas a sobrepesca o se explotan en su límite de supervivencia. Los humedales se degradan y declinan en cuanto a la cantidad y la calidad del agua. Numerosas especies de agua dulce se encuentran amenazadas o en peligro de extinción. Avanza la desertificación y los suelos muestran graves procesos erosivos y pierden fertilidad. La contaminación y los residuos industriales y urbanos crecen rápida y peligrosamente.

Este escenario nacional es resultado de un proceso que no ha cuidado la necesaria conciliación entre el crecimiento económico por una parte y el progreso social, la protección del ambiente y la protección de los recursos naturales y su prudente administración por la otra.

En la Argentina frecuentemente se ha privilegiado el crecimiento económico mayor e inmediato sin la debida consideración de su impacto ambiental, razonando erróneamente que los problemas ambientales podrán resolverse cuando se alcancen mayores niveles de ingreso y de desarrollo tecnológico.

Sin embargo, los daños ambientales pueden ser irreparables y la restitución no siempre es posible. La remediación no es una alternativa que permita restablecer la calidad del recurso dañado y cuando los problemas se agudizan suele prevalecer la resignación pasiva.

Las dudas paralizantes y la carencia de decisiones suponen la ilusión de que el problema ambiental se resolverá solo, ignoran que esa ilusión es equívoca y peligrosa, y desconocen que es posible reducir drásticamente el impacto negativo de la acción humana sobre los sistemas naturales. Una acción ecológicamente racional sentará las bases para fundar un nuevo modelo de desarrollo.

Cooperación con la comunidad internacional.

Sin perjuicio de lo anterior la República Argentina ha mantenido una clara posición en defensa de la calidad del ambiente desde la década de 1950. Ello ocurrió en la negociación del Tratado Antártico, en la Comisión Ballenera Internacional, en la FAO, en la UNESCO y en otros organismos internacionales. Esa acción se profundizó en la década siguiente en el Consejo Económico y Social, en las sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas, en la adopción de diversas resoluciones sobre materias ambientales, sociales y económicas y en las conferencias y reuniones internacionales que desde la década de 1970 han jalonado el camino hacia una cooperación internacional que asegure condiciones de vida digna a todos los habitantes del planeta.

Nuestra representación lideró la negociación del Protocolo de Kioto en cuya gestión continúa participando activamente y también se destacó en la Conferencia de Johannesburgo sobre Desarrollo Sostenible.

Consecuentemente la República Argentina el país tiene títulos muy bien fundados para continuar orientando la cooperación multilateral en las materias vinculadas con el Cambio Ambiental Global en las conferencias y en los organismos internacionales.

Exhortación

En nuestro país resulta indispensable promover la responsabilidad social, económica y ambiental de todos los sectores para procurar la sostenibilidad del proceso de desarrollo. Para ello, el sistema científico y tecnológico, los empresarios, los trabajadores y las autoridades, deben concentrar conocimientos, recursos y esfuerzos para proteger y restaurar nuestros ecosistemas degradados, tanto los naturales como los urbanizados.

Deben modificarse los hábitos de producción y consumo para aprovechar en forma sostenible los recursos naturales y los desarrollados por el hombre. También es un deber promover el ordenamiento territorial y sistemas de gestión ambiental aptos para el sector productivo.

La República Argentina necesita reorientar el actual proceso de desarrollo dotándolo de amplitud, con participación de todas las áreas de la economía, de todas las zonas geográficas y de todos los grupos sociales. Es necesario integrar las políticas ambientales en la formulación de las políticas económicas y sociales centrales. El cuidado del ambiente y de los recursos naturales no funciona eficientemente cuando se lo aplica como un agregado tardío a decisiones básicas adoptadas sin haber tenido en cuenta desde el comienzo las consideraciones ecológicas.

Además el Estado debe evitar que los sectores de menores recursos soporten las peores condiciones de calidad de vida y sean los más agredidos por la contaminación y las demás externalidades negativas de un desarrollo no sostenible.

En este momento económico y social la Argentina está en condición propicia para sustituir modalidades de producción y consumo que no son sostenibles. El desafío de construir y consolidar un porvenir venturoso y fecundo mediante un desarrollo integrado y sostenible es altamente motivador, debe ser encarado con decisión y puede ser realizado con éxito. Los resultados que se alcancen beneficiarán a todos los habitantes y permitirán cuidar el patrimonio ambiental de la Nación, generando un país más vigoroso y una mejor calidad de vida para la generación presente y las venideras.

Propuesta de medidas y acciones inmediatas

El Cambio Ambiental Global descripto evidencia la urgente necesidad de la adopción de medidas y la ejecución de acciones orientadas a:

a) Integrar la información necesaria sobre las variables geofísicas, biológicas, sociales y económicas que permitan un manejo seguro y confiable de las actividades gubernamentales y privadas involucradas en las metas conducentes al progreso de la sociedad argentina.

b) Desarrollar, promulgar y poner en vigencia efectiva las leyes y reglamentaciones que aseguren el cumplimiento del Artículo 41 de la Constitución Nacional, a la luz de los nuevos escenarios naturales y humanos que resultan del Cambio Ambiental Global.

c) Posibilitar y propiciar que la obligación legal de preservar y mejorar el ambiente, bien común de todos los habitantes, sea asumida por la población en sus conductas individuales y particularmente, por el gobierno nacional y los gobiernos provinciales y municipales.

d) Constituir y mantener vigentes y efectivas instituciones apropiadas para la información y la educación ambientales y velar por el cumplimiento de las normas.

e) Realizar los estudios e investigaciones para un eficiente ordenamiento territorial, ambiental y productivo, con información completa de los recursos naturales (climáticos, geológicos y biológicos) y sus proyecciones posibles en tiempo y espacio, con el fin de asegurar el bienestar de todos los habitantes del territorio nacional.

f) Iniciar el análisis de las estrategias de adaptación necesarias para hacer frente a las consecuencias adversas del Cambio Climático Global, tomar provecho de los efectos beneficiosos que pudiera tener, y promover la mitigación de la emisión de gases de efecto invernadero y el secuestro y almacenaje de esos gases.

g) Promover y facilitar la contribución y participación de los profesionales y científicos y de sus centros e instituciones de base, para analizar y evaluar los problemas ambientales en las reuniones, conferencias, simposios y talleres regionales e internacionales.

h) Establecer un órgano consultivo nacional competente en esta materia para asesorar a los poderes públicos, integrado por representantes de reconocida valía profesional, científica, empresarial, sindical y de otros sectores relevantes.

i) Mantener el nivel de actuación de la República Argentina en los ámbitos bilateral, regional y multilateral y continúe y profundice las acciones y los esfuerzos que contribuyan a consolidar la solidaridad y la cooperación entre todas las naciones del mundo. www.ecoportal.net


http://www.ecoportal.net/content/view/full/72567/

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